Cuando hablamos de silencio entendemos el hecho de no hablar o de no hacer ruido pero solo para el oído convencional, y naturalizamos el ruido mental porque es silencioso.
Culturalmente está aceptado el ruido tanto externo como mental interno, así se ha normalizado vivir de forma superficial y caótica.
Es asombroso pero hay personas con miedo a acallar el ruido externo (máquinas, radios, televisores, celulares, conversación, todo sonido urbano), temen enfrentarse con su propio ruido interior, temen al vacío, a la falta de estímulo. Entonces la responsabilidad de la toxicidad mental pasa a ser de uno mismo, con egoísmo e ignorancia.
El uso abusivo de la tecnología ha incrementado la forma compulsiva de pensar, la hiperactividad mental genera un estilo dominante y robótico, sin libertad, alejado del sentido existencial.
Porque cuando hay control del placer, cuando hay dominación mental, se bloquea la libertad.
Creer que uno es la mente llega a ser adictivo, el famoso pensar por pensar, la mente densa nos aleja de una calidad de vida sana y óptima. Parece ser inagotable la mente hablando, dialogando con miedos, dudas, preocupaciones, caprichos y demás, generando sufrimiento sin poder complacer al ser. Este ruido mental no tiene ninguna utilidad mas que engrandecer al ego: el caótico mundo de la mente, basándose y estimulándose con todo lo superficial destruyendo la profundidad de la vida.
Si queremos mejorar debemos comprender que el ruido más contaminante no se oye afuera, sino que se instala en nuestra mente y en la identificación con esa mente intoxicada y agotada.
La mente comienza a silenciarse cuando no me identifico con ella, sin darle poder a las creencias, recuerdos, deseos, dudas, observarla tal como es, como funciona, con sus diálogos, sus preocupaciones y razonamientos.
Comencemos silenciando el sonido externo alejándonos de los lugares ruidosos, estimulantes y con presencia de otras personas que hablan. Luego el ruido mental dejando que pasen los pensamientos, es como pensar sin palabras sin análisis o comparación alguna. Cuando el silencio mental se presenta la mente se desintoxica quedando pura y limpia, recién lavada; los bloqueos se van y la energía densa se transforma en creativa, compasiva, liberando el potencial de una mente clara. La mente cuando está calma es capaz de crear cosas maravillosas, extraordinarias, tomando decisiones benévolas, llevando al ser a una plenitud existencial.
Para llegar a transformar la conciencia se requiere coraje, voluntad, esfuerzo, perseverancia. En los retiros de silencio en la naturaleza se ha experimentado la vida de los animales, que para disminuir la tensión social pasan tiempo compartiendo energía sin palabras, contemplándose, observándose, acariciándose, oliéndose, comprendiéndose desde la esencia pura, expresando de esta forma sentimientos puros, libres de mentalidad.
LIBRE
Cuando se es auténtico
Cuando es verdadero,
Se puede sentir paz,
Cuando se siente paz
Se es libre,
Cuando se es libre
Así puede amar
Cuando se vive en amor
Se expande felicidad.
En el silencio se puede contemplar la realidad absoluta.
Por Sri Devi
No hay comentarios:
Publicar un comentario